La crisis sanitaria del Covid-19 supuso el cierre de los locales de hostelería durante meses y, además, una vez que reabrieron, la necesidad de asumir nuevas pautas de limpieza y desinfección. ¿Se te hace un mundo y no sabes por dónde empezar? No te preocupes, aquí te explicamos paso a paso cómo tienes que actuar.
Es sumamente importante que tengas claro que estas pautas son indefinidas. Es decir, y salvo notificación expresa en sentido contrario de la Administración, tienes que seguirlas siempre.
Por otra parte, conviene que la política de limpieza y desinfección se siga de forma metódica. Todos los miembros del equipo del local han de actuar de forma coordinada. Este consejo vale para casi todo en la vida, pero mucho más cuando se trata de evitar rebrotes del virus.
Toma nota, porque seguir este proceso ordenadamente te va a ahorrar muchos disgustos a la larga.
En primer lugar, es importante recordar que hay unos requisitos previos que hay que aplicar. Por un lado, las restricciones de aforo y la distancia mínima de seguridad, que vendrá determinada por la normativa autonómica. En cualquier caso, la distancia social es de 1,5 a dos metros entre mesas. La idea es minimizar las posibilidades de contagio.
Otro aspecto importante es que los establecimientos están obligados a proporcionar desinfectante para los clientes en las entradas. Esto permitirá reducir los riesgos fácilmente. Hay que tener en cuenta que este es un primer paso para poder trabajar con seguridad. En los aseos hay que disponer de jabón, desinfectante y papel.
La recepción de la mercancía es otro de los puntos calientes que no hay que obviar. Como principio general, hay que evitar que el proveedor tenga que entrar en el local. Además, hay que eliminar los embalajes, desinfectar los envases que hayan estado en contacto y cambiar los contenedores.
Por otra parte, hay que señalar que la desinfección integral se puede hacer dos veces al día. El consejo es hacerlo al final del día o durante el mediodía, pero esto dependerá del tipo de negocio. Lo mejor es aplicar lejía, aunque existen otras posibilidades.
Cuando se esté prestando el servicio, todos los camareros y cocineros han de llevar mascarilla o EPI´s. Lo cierto es que la normativa autonómica obliga a hacerlo a los ciudadanos en casi todos los territorios, pero aquí es generalizado. Esta no se puede quitar en ningún momento, sea cuando sea, y se tiene que limpiar con frecuencia.
¿Cómo se coloca una mascarilla? fuente: Ministerio de Consumo.
En segundo lugar, hay que tener en cuenta que las mesas se tienen que desinfectar antes y después de cada cliente. A la mínima sospecha de padecer algún síntoma del Covid-19, el trabajador ha de notificarlo y no asistir al puesto de trabajo. El servicio, sea en mesa o en barra, tiene que ser evitando, siempre que se pueda, el contacto directo.
Por otra parte, los clientes también han de llevar mascarilla y solo se la pueden quitar para tomar su consumición. Esto supone, por ejemplo, que mientras esté esperando, tiene que llevar la mascarilla y, además, en la mesa no puede haber servilleteros, palilleros o vinagreras.
Otro elemento es que hay que evitar, en la medida de lo posible, los desplazamientos de clientes y trabajadores. Esto supone acotar bien los espacios de trabajo de cada uno de los miembros del equipo. En ocasiones esto será complicado, pero el Gobierno realiza esta recomendación general.
El uso de material desechable es, también, recomendable y se debería priorizar. Esto incluirá la mantelería, pero también tenedores, vasos, platos y todo lo que sea posible. Eso sí, esta medida no tiene carácter obligatorio.
Hay otras pautas que se tienen que seguir referentes al pago. En primer lugar, fomentar siempre que se pueda el pago con tarjeta, desinfectando el TPV después de cada uso. Si se cobra en efectivo, es recomendable que lo haga siempre el mismo trabajador y derivar el dinero a una bandeja o mesa.
Es relativamente común que los locales de hostelería tengan más de un turno al día. Si esto sucede, se tiene que hacer una limpieza general en el momento en que se dé el cambio. Esta es la manera de evitar contaminaciones que se extiendan y atajar los posibles problemas.
La limpieza integral del local ha de afectar a todos los lugares donde haya actividad, desde la sala a la barra, pasando por la cocina, almacén, aseo y vestuarios, en caso de existir.
Es imprescindible que los cambios de ropa se hagan en el lugar correspondiente, como los vestuarios si están habilitados. Esta es la forma de aislar cualquier foco de infección. La ropa de trabajo, a ser posible, debería lavarse por separado. Además, hay que evitar el contacto entre ropa de calle y de trabajo.
El lavado de ropa, EPI´s, mantelería y demás se tiene que realizar a un mínimo de 60º C, mientras que la vajilla tendrá que ser a 80º C. Hay que utilizar alguno de los productos autorizados por el Ministerio de Sanidad. No está de más decir que esto ha de realizarse, como mínimo, una vez al día.
Las pautas de limpieza y desinfección que fija el Gobierno son dinámicas y pueden matizarse según el territorio. En cualquier caso, si las sigues con el orden necesario, será mucho más difícil que tengas problemas en tu local. En Ibercook, por la parte que nos toca, te lo vamos a poner más fácil para que puedas cumplir con tu cometido.